Hace unos meses atrás, más concretamente 

el invierno pasado, mi hijo

y yo, nos entretuvimos con esto

Medida va, medida viene,

intentamos hacer una huerta.

Preparamos el cajón de madera

y contratamos una máquina

para cavar un pozo y retirar la parte

superior de la tierra que tiene mucha tosca.

Quiso el destino, que no se pudiera hacer nada.

El invierno pasado llovió prácticamente

día por medio, por lo que no se podía

caminar por el pasto y menos entrar una máquina.

Mi esposo intentó cavar y ahí se dio cuenta

de que el cajón era muy bajo

y el dolor de espalda muy grande.

Entonces se le ocurrió conseguir

bebederos de caballos.

Me regalaron dos hechos de madera

y ya sembré lechuga y rúcula que les voy a mostrar en otra entrada.

Mientras tanto me entretuve con macetas

Y sembré orégano para empezar

Tengo calabazas y algunos tomates perita

de los cuales todavía no pude probar ninguno,

porque los gusanos no me dan tregua...

Les muestro esta rica sopa crema de cebollas

con crutons, que es de mis preferidas

Mientras tanto estoy uniendo los bloques 

del quilt que casi desayuna mi perra.

Creo que mañana termino!

Un beso, Sil