Bendita primavera!

Hace un par de días salió el sol y eso hace que en un primer momento, una largue la aguja y salga a investigar a ver que pasó con las plantas, con el pasto, etc.

Durante el mes de agosto suele llover 60 ml y este año llegamos a 400!!!!!!

No se podía pisar el pasto porque el agua saltaba para arriba. 

Todo completamente anegado y eso que yo vivo en una pequeña loma donde todo escurre automáticamente. Hasta había olor a río!

Pero salió el sol y uno de los días fue de mucho viento, 

lo que secó bastante y me permitió revisar mis arbolitos frutales.

Están al costado de las ventanas de mi dormitorio y desde ahí los veo todas las mañanas.

Tengo mandarinas, pomelos, limones y naranjas.

Durante todo el invierno nos proveyó del jugo matinal y hacía casi un mes

 que prácticamente no podía salir a  buscar alguna fruta.

Durante una sesión de fotos de mis quilts que hizo mi hijo Tomás veo una mancha naranja en el árbol.

Ven un puntito brillante en el arbolito del fondo?

Me fuí acercando y descubrí el tesoro

Quedaban tres naranjas super grandes!

Las últimas de este arbolito que este invierno estuvo muy benevolente.

Particularmente odio el calor pero no veo la hora de empezar a ver esto en el pasto:

Justamente esta semana es mixta, un poco de sol y un poco de nubes. Aprovechamos nuevamente con Tomás para fotografiar el último trabajo que terminé hoy y que les mostraré próximamente.

Nos vemos la próxima! Un beso, Sil